viernes, 3 de julio de 2009

La regla de oro

Hace tiempo estoy por escribir sobre esto...

Los seres humanos hemos vivido siempre en la búsqueda de aquello que conocemos como felicidad, la cual ni siquiera estoy seguro que sepamos qué es exactamente. Si hiciésemos una encuesta a miles de gente cada quien daría su propia definición de la felicidad, según sus propios intereses.

Muchas han sido las intenciones de acercarnos a ese paradigma, cueste lo que cueste, y como muchas veces el fin justifica los medios en pos de la "felicidad", de unos pocos, eso sí, se han librado las más cruentas guerras, se ha matado, saqueado...no pretendo hacer historia.

Desde tiempos antiguos conocemos numerosos códigos de conducta que, de seguirlos, estoy convencido de que seríamos mucho más felices de lo que somos, Los 10 mandamientos, según la Biblia, entregados por el mismo Dios a Moisés son quizás los más conocidos...

Entonces, ¿por qué seguimos buscando lo que ya se nos viene dando desde hace tiempo...?, a mi juicio porque los seres humanos somos egoístas por naturaleza, vamos a los que nos interesa, sin pensar en los demás, aquel que tiene al menos un poquito de poder lo usa sobre el que no lo tiene...hoy en día nos escandalizamos cuando vemos o leemos pasajes de la historia antigua, cuantas guerras por mantener la riqueza o la posición de unos pocos, las peleas entre gladiadores, por solo mencionar un ejemplo, seres humanos matándose entre sí o echados a las fieras, ¿para qué?, para que otros seres humanos se divirtiesen con ese "espectáculo"... podría poner muchos ejemplos más.

Pero lo triste es que no hemos cambiado, los hombres seguimos siendo los mismos, hay muchos Faraones modernos, que se creen dueños de sus pueblos y sus destinos, que los manejan a su antojo y conveniencia, no deberíamos escandalizarnos de nuestro pasado cuando hoy hacemos cosas incluso peores, la gente mata sin que siquiera el otro pueda defenderse...

Es la triste realidad, cuando debería ser todo lo contrario. Los 10 mandamientos están muy bien, sin embargo siempre he pensado que la búsqueda de la felicidad es aún mucho más simple que eso, todo se resumen en una sola regla que aún no entiendo por qué nadie, nadie cumple, la regla de oro :

NO HAGAS A NADIE LO QUE NO QUIERAS QUE TE HAGAN A TI

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